Me perdí

Hoy me perdí, me senté en un rinconcito, en el suelo, estaba a gusto, serena, tranquila, miraba a lo lejos sin mirar nada en concreto y sin darme cuenta……, me perdí.
Dentro, conmigo, a ratos tambien contigo, con mis “soles”, es curioso, la de cosas que puedes aprender de ti mismo cuando paseas por dentro y de los demás si observas, se aprende más mirando a unos ojos que escuchando unas palabras.
Me perdí en el mar con los pies descalzos sobre la arena, en el campo tumbada bajo un árbol, en el azul del cielo, en el verde de la hierba, me perdí de tal forma que al encontrarme de nuevo no era capaz de recordar todos los sitios que visité, fue largo el viaje acompañada de los que están y de los que ya partieron y no han de volver.
Estuve en sitios que ya conocía y en lugares en los que no había estado, es como si me llevasen de la mano, en cada ocasión sacaban un trocito de mí y lo ponían ante mis ojos. La mayoría me eran familiares, llevo mucho tiempo viviendo conmigo y me conozco bien, pero me descubrieron alguno que yo pensé que no tenía o que había olvidado que estaba ahí.
Más cosas que llevar a cuestas, y mira que voy soltando lastres, pero hay rincones que no queremos soltar nunca, que los llevamos a gusto aunque pesen y nos negamos a dejarlos ir.
Es curioso como vuelvo a encontrarme, en el mismo sitio en el que me perdí, en la misma posición, en el mismo rincón y en el mismo suelo, recuperando esa mirada perdida que se va centrando en cualquier objeto que se halle frente a mí, como todo vuelve a su sitio, como coloco cada cosa en su lugar, el día menos pensado igual cambio alguna cosa de posición, lo pensaré la próxima vez que me pierda.
¿Tu a veces tambien te pierdes? ¿Nos perdemos juntos?